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Manejo de la vaca en el parto y del becerro recién nacido

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El rendimiento de los reemplazos depende de la calidad de los cuidados del becerro recién nacido, es por ello que conocer los procedimientos que se llevan a cabo durante esta etapa es tan importante.

Enseguida te mostramos una serie de acontecimientos que se manifiestan alrededor del parto, así como prácticas de sanidad y manejo que te ayudarán a llevar a una crianza de becerros recién nacidos exitosa.

Instalaciones adecuadas para los partos

Contar con un espacio separado del resto del hato es conveniente, estos se denominan corrales de parto o área de maternidad, donde son alojados los animales cercanos a la fecha estimada del nacimiento de la cría.

Deben tener una dimensión mínima de 25m² en espacios individuales, mientras que en los corrales grupales se tiene que dejar un espacio de al menos 15m² por vaca. Por lo tanto, es necesario estimar los espacios para los partos mensuales promedio.

Los corrales de parto deben contener abundantes camas, además de encontrarse limpios, secos, libres de estiércol para evitar infecciones. No pueden usarse para vacas enfermas, ya que esto crea un ambiente muy contaminado, generando un riesgo mayor de propagar enfermedades a los individuos vulnerables.

Duración de la gestación y etapas del parto en las vacas

En las hembras Holstein la preñez dura 9 meses o 280 días en promedio, existen variaciones de acuerdo a la raza y las cruzas entre ellas, por lo que el rango puede ir de los 276 a los 283 días.

Hay una serie de signos que indican que una hembra parirá dentro de las próximas 24 horas, estos involucran la distensión de la ubre, relajación de la pelvis, disminución del consumo de alimento y agua, reducción de la rumia, cola levantada, mucosidad en la vulva, se observa inquieta y muge constantemente.

El proceso de parto se divide en tres fases, a continuación, te enseñamos cómo reconocer cada uno de ellos.

1.- Inicio de las contracciones uterinas y preparación del canal de parto

Comienzan las ondas de contracción a una frecuencia de 12 a 24 por hora, esto ayuda a abrir el camino a través del cuello uterino, acomodando al becerro en la posición adecuada. 

Inicia la dilatación y se produce una secreción espesa, turbia y viscosa. Esta etapa suele durar entre 2 y 6 horas, tiende a ser más corta en hembras que han tenido más de un parto.

2.- Paso del becerro por el canal del parto

La vaca se acuesta de lado, las contracciones aumentan a 48 por hora, una vez que la cría ha entrado en el canal se observa cómo sobresale de la vulva el saco amniótico. Esta fase tarda en promedio 1 hora en vacas multíparas y 3 horas en vaquillas primíparas.

3.- Expulsión de la placenta

Una vez que el becerro ha nacido, la vaca debe arrojar la placenta en un periodo promedio de 6 horas. Cuando este proceso sobrepasa las 12 horas se considera un problema, denominado retención placentaria, en el cual es importante contactar a tu médico veterinario y evitar extraerla.

¿Cuándo se debe intervenir en el parto?

Se tiene que mantener un monitoreo constante en los corrales, lo ideal es revisar al menos cada 2 horas, esto evitará la pérdida de animales que necesitan asistencia. Una regla general es intervenir cuando las patas están visibles durante 2 horas (regla de dos ​​patas-dos horas) y no hay signos de progreso significativo.

Recuerda que la distocia (retraso o dificultad para parir) debe ser atendida siempre por un profesional o personal calificado y entrenado en este procedimiento, ya que de no ser así puede resultar contraproducente.

Cuidado de las vacas después del parto

Una vez que se ha llevado a cabo el nacimiento, se permite que la vaca se ponga de pie y estimule a la cría (sin ingerir la placenta). Después, se realiza un examen físico general, asegurándose de que no haya un becerro gemelo, así como, para verificar si hay desgarros en el tracto reproductivo o sangrado excesivo.

Las vacas deben observarse de forma frecuente en la fase postparto, ya que pueden manifestarse otras complicaciones entre las que se encuentran:

  • Retención placentaria
  • Metritis
  • Endometritis
  • Infecciones vaginales
  • Fístulas recto-vaginales
  • Prolapso uterino, cervical o vaginal
  • Fracaso de la bajada de la leche
  • Obstrucción de los pezones
  • Hipocalcemia
  • Acidosis ruminal
  • Cetosis

Cuidado del becerro recién nacido

El periodo más crítico para la vida de un neonato es la primera hora después del nacimiento, una intervención rápida puede evitar secuelas posteriores. Te enseñamos cómo criar becerros recién nacidos, mediante una recopilación de los procedimientos que involucran la atención general.

Evaluación de la vitalidad

Inmediatamente después del parto se tiene que evaluar el vigor del becerro recién nacido, esto se efectúa mediante el monitoreo de características individuales como la capacidad de respuesta a estímulos, el tono muscular y el reflejo de succión.

Además, se deben medir una serie de indicadores que te mostramos enseguida, tiempos fuera de lo señalado requieren atención médica inmediata.

Reanimación

Por lo general, la mayoría de los becerros no requieren de esta práctica, sin embargo, los animales que sufren dificultades al nacer necesitan atención. Pueden identificarse de acuerdo a la etapa en:

  • Antes del parto. Nacimientos prematuros, mala presentación y distocia (parto lento o difícil).
  • Durante el parto. Extremidades grandes, lengua o cabeza hinchada, encías u hocico azulados (cianóticos).
  • Después del parto. Falta o ausencia de respiración, jadeo o bramido; incapacidad de levantar la cabeza, sentarse, pararse y succionar.

El manejo debe ser realizado por el médico veterinario de acuerdo a la evaluación del caso.

Desinfección del ombligo

Una fuente potencial para adquirir infecciones en un recién nacido es el cordón umbilical, pues muchos vasos sanguíneos conducen directamente desde el ombligo a los órganos. Por ello, es necesario sumergirlo en una solución de yodo al 7% o clorhexidina al 2%.

Manipula el ombligo de todos los becerros con las manos limpias o enguantadas. Debe revisarse constantemente durante la primera semana para detectar sangrado excesivo, dolor, hinchazón anormal, olor o pus, y se deberá tratar según lo recomendado por tu médico veterinario.

Separación de la vaca y el becerro

La separación temprana de la madre y la cría ayuda a prevenir la trasmisión de infecciones, porque después de 60 a 90 minutos de nacido, el becerro puede ponerse de pie, tratando de mamar y lamer superficies contaminadas, aumentando el riesgo de la incidencia de enfermedades de becerros recién nacidos.

Consumo de calostro

Los becerros nacen con muy poca inmunidad debido a la estructura de la placenta, de manera que el adecuado consumo de calostro de calidad es crucial para ayudarlos a combatir padecimientos como la diarrea viral bovina (DVB) y la enfermedad respiratoria bovina (ERB).

Mantenimiento de registros

Llevar un listado apropiado te ayudará a detectar y resolver problemas a tiempo. Los datos relevantes que debes anotar son:

  • Número de identificación o arete de cada becerro
  • Fecha y lugar de nacimiento
  • Sexo
  • Raza
  • Facilidad de parto
  • Padre y madre
  • Peso al nacer
  • Cualquier enfermedad, malformaciones y signos vitales
  • Administración de tratamientos

Ahora que ya conoces los principales procedimientos de sanidad, cuidados y manejo del becerro recién nacido, es fundamental ponerlas en práctica. Recuerda siempre consultar con tu médico veterinario si tienes alguna duda, o contactarnos en Club Ganadero.

¿Quieres conocer más sobre la crianza de becerras? Descarga la siguiente guía gratuita, donde podrás aprender más de la diarrea neonatal bovina.

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